El Tribunal Supremo de España, máxima instancia judicial del país, avaló hoy que el gobierno exhume del Valle de los Caídos los restos del dictador Francisco Franco, y sean trasladarlos a un cementerio próximo a Madrid, en contra de los deseos de la familia.
Franco está enterrado desde su muerte en 1975 en el monumento del Valle de los Caídos, que el propio dictador ordenó construir, y sus nietos querían que, en caso de exhumación, fuera inhumado de nuevo en la catedral de La Almudena, en el centro de Madrid.
Fuentes judiciales citadas por la agencia de noticias EFE indicaron que el alto Tribunal rechazó en su totalidad el recurso que los nietos del dictador habían presentado contra el acuerdo del gobierno del pasado 15 de marzo que fijaba la exhumación para el pasado 10 de junio, fecha que debió posponerse.
El gobierno del socialista Pedro Sánchez tomó la decisión de exhumar los restos del dictador en aplicación de la ley española de la Memoria Histórica, que prohíbe homenajear y exaltar la dictadura franquista (1939-1975).
La decisión del Ejecutivo establecía la inhumación en el cementerio de Mingorrubio-El Pardo, en las afueras de Madrid, donde está enterrada desde 1988 la esposa de Franco.